Las vitaminas faciales pueden aplicarse mediante una técnica médico-estética conocida como mesoterapia, a través de microinyecciones en la dermis (la capa intermedia de la piel). La mesoterapia facial puede hacer uso de un cóctel de vitaminas inyectables para corregir la piel cuando muestra fatiga, estrés, falta de vitalidad y luminosidad a consecuencia de la deshidratación y el fotoenvejecimiento.
Las mesoterapia facial con vitaminas permiten estimular el metabolismo biológico de la piel, reparándola desde la dermis y mejorando la síntesis de elastina y colágeno. Esta técnica suele recomendarse a partir de los 25 o 30 años como prevención antiedad ya que permiten mejorar el proceso de reparación la piel y fortalecerse ante los factores externos que aceleran su deterioro, especialmente en el rostro que está más expuesto.
Este tratamiento está pensado para reponer la pérdida de vitaminas, oligoelementos, nutrientes y minerales junto con otros componentes como el ácido hialurónico que permiten nutrir la piel en profundidad